Fundamentos De Los Sistemas De Orientacion Misiles Aire-Aire

 Control del Misil

  Se compone de un sistema de control de actitud que opera como un piloto automático que amortigua las fluctuaciones que desvían al misil de un vuelo ordenado, lo mantienen en  la actitud deseada controlando los ejes de balanceo, cabeceo y guiñada. 

   El segundo elemento es un sistema de control de trayectoria de vuelo que guía al misil al punto ideal de interpretación. Estos dos sistemas pueden entregar al misil cerca de su objetivo mientras sea dinámicamente estable.

  Sensores

   Son los que dan información de posición, dirección y orientación del blanco, para dar las ordenes de corrección de rumbo. El tipo de sensor que se utiliza estará determinado por factores como el rango máximo de operación, las condiciones de operación, el tipo de información necesaria, la precisión requerida, el ángulo de visión, y el peso y tamaño del sensor, y el tipo de objetivo y su velocidad.

 Acelerómetros

    Un acelerómetro como su nombre lo indica, es un dispositivo para medir la aceleración,  dicho elemento es el corazón del sistema de navegación inercial INS siendo este sistema un implemento necesario en vehículos, navales, aéreos y terrestres, además de misiles para poder registrar un dato preciso de desplazamiento neto, el cual es una información que  permite determinar cuánto se ha avanzado y cuanto falta para llegar al objetivo y poder determinar si se activan o no sensores adicionales a bordo (si es el caso) como el radar activo de los AAM.

  Un ejemplo de acelerómetro es el péndulo de los que se pueden disponer hasta tres para cada uno de los ejes de movimiento del arma (distancia, altitud, azimut). En el caso del que se ubica en el eje transversal, este registraría un movimiento contrario a la dirección de la aceleración del misil y aunque luego vuelva a su posición original  se habrá registrado un dato de aceleración que se interpreta de la segunda Ley de Newton que establece que la aceleración de un cuerpo es directamente proporcional a la fuerza aplicada e inversamente proporcional a la masa del cuerpo. 

 Fases de Orientación

  La orientación de misiles generalmente se divide en tres fases: refuerzo, medio curso y terminal. Estos nombres se refieren a diferentes partes de la ruta de vuelo. La fase de refuerzo también se puede llamar fase de inicio o inicial.

  Fase de Aceleración: también llamada fase de refuerzo o boost es la parte inicial del vuelo del misil en donde  “aceleran” a velocidad de vuelo por medio de un booster. En los misiles de fase de aceleración simple, los mismos solo aceleran luego de dejar el lanzador, hasta que se agota el propelente; en cambio en los misiles de fases múltiples de aceleración los mismos pueden tener refuerzos para distinta fases del vuelo para aumentar el alcance y mantener una alta velocidad promedio.

 El objetivo de esta fase es colocar el misil en una posición en el espacio desde donde pueda "ver" el objetivo o donde pueda recibir señales de guía externas. Durante la fase de impulso de algunos misiles, el sistema de guía y las superficies aerodinámicas se bloquean en su posición. Otros misiles son guiados durante la fase de impulso.

  Fase Medio curso / Midcourse: La segunda fase o fase de orientación a mitad de camino suele ser la más larga tanto en distancia como en tiempo. Durante esta parte del vuelo, se pueden requerir cambios para llevar el misil al rumbo deseado y asegurarse de que se mantenga en ese curso. Durante esta fase de orientación, se puede suministrar información al misil por varios medios. En la mayoría de los casos, el sistema de guía de curso medio se utiliza para colocar el misil cerca del objetivo, donde el sistema que se utilizará en la fase final de la orientación puede hacerse cargo. En otros casos, el sistema de guía de mitad de curso se usa para la segunda y tercera fases de orientación.

    Fase Terminal: La última fase de la orientación de misiles debe tener alta precisión así como una respuesta rápida a las señales de guía. El rendimiento de misiles se convierte en un factor crítico durante esta fase. El misil debe ser capaz de ejecutar las maniobras finales necesarias para interceptar dentro del tiempo de vuelo disponible en constante disminución. La maniobrabilidad del misil dependerá de la velocidad y del diseño del fuselaje. Por lo tanto, un sistema de guía de terminal debe ser compatible con las capacidades de rendimiento de misiles. Cuanto mayor es la aceleración del objetivo, más crítico se vuelve el método de orientación del terminal. En algunos misiles, especialmente los misiles de corto alcance, se puede usar un solo sistema de guía para las tres fases de la orientación


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